Los sofás de tela pueden ser el centro de nuestro salón, pero también son imanes para manchas, polvo y suciedad. En este artículo, aprenderás cómo limpiar un sofá de tela y devolverle su frescura, con métodos simples y efectivos que puedes aplicar en casa. Con estos consejos, ¡tu sofá se verá como nuevo!
Con el uso diario, los sofás de tela acumulan polvo, sudor, restos de comida y manchas. Si no se limpian periódicamente, estos elementos pueden dañar la tela y hasta causar malos olores. Mantener un sofá limpio no solo mejora su apariencia, sino también ayuda a prolongar su vida útil.
Cada sofá es diferente y algunos requieren métodos específicos de limpieza. La etiqueta de tu sofá de tela generalmente incluye un código que indica el tipo de limpieza adecuado:
- W: Se puede limpiar con agua.
- S: Solo limpieza en seco.
- WS: Se puede limpiar con agua o solvente.
- X: Solo limpieza profesional.
Antes de comenzar, asegúrate de tener estos materiales a mano:
- Aspiradora con accesorio de cepillo
- Paño de microfibra
- Cepillo de cerdas suaves
- Detergente suave o específico para telas
- Agua tibia
- Bicarbonato de sodio (para olores y manchas difíciles)
Comienza aspirando todo el sofá, prestando atención a las grietas y pliegues. Esto eliminará el polvo y la suciedad acumulada que pueden hacer que el sofá se vea opaco y ayudarán a evitar que se impregne más la suciedad.
Si encuentras manchas, puedes preparar una solución de detergente suave y agua tibia. Humedece un paño de microfibra en la mezcla y limpia las manchas con suaves movimientos circulares. No uses demasiada agua para evitar que la tela se sature.
Para eliminar los olores, espolvorea bicarbonato de sodio en todo el sofá y déjalo actuar entre 15 y 20 minutos. Luego, aspira el bicarbonato. Este método es ideal para refrescar el sofá y neutralizar malos olores.
Si la etiqueta de tu sofá permite el uso de agua (códigos W o WS), mezcla un poco de detergente suave con agua y, usando un paño limpio, pasa sobre la superficie del sofá. Evita mojar demasiado la tela y asegúrate de secar bien el sofá después.
Limpiar un sofá de tela no es algo que tengamos que hacer todos los días, pero hay algunos consejos que pueden ayudar a mantenerlo fresco por más tiempo:
- Aspirado Semanal: Pasa la aspiradora cada semana para evitar que el polvo se acumule.
- Cubrir el Sofá: Usa una funda lavable para proteger la tela, especialmente si tienes mascotas.
- Evitar Comer en el Sofá: Reducirá las posibilidades de manchas y restos de comida.
- Usar productos inadecuados: Productos como lejía o detergentes muy fuertes pueden dañar la tela.
- Mojar en exceso: El exceso de agua puede causar malos olores y la aparición de moho.
- Olvidar leer la etiqueta: Ignorar las instrucciones de limpieza puede arruinar la tela.
Sí, el vinagre diluido es excelente para manchas difíciles y para eliminar olores, pero úsalo con moderación y pruébalo primero en un área pequeña para asegurarte de que no decolore la tela.
Si el bicarbonato no ha sido suficiente, puedes usar un neutralizador de olores específico para telas o buscar servicios de limpieza profesional.